Las terapias no farmacológicas en las demencias fueron definidas
por el Grupo Internacional de Trabajo de Terapias No Farmacológicas (INPTP),
liderado desde la Fundación Maria Wolff. Según este grupo, son terapias no
farmacológicas aquellas intervenciones no químicas, teóricamente sustentadas,
focalizadas y replicables, que demuestran un efecto beneficioso en la persona
con demencia, en el cuidador, o en los costes derivados de la enfermedad.
La aplicación de las terapias no farmacológicas debe estar
basada en un diagnóstico previo. Estas terapias se pueden aplicar en la persona
con demencia, en su cuidador (profesional o no profesional) o en ambos.
Es importante diferenciar las
terapias de los cuidados, un concepto más global y más
sustentado en el sentido común y la experiencia. Aunque es evidente que
cuidados y terapias no farmacológicas están íntimamente relacionados. De hecho,
muchas intervenciones que considerábamos terapia no farmacológica (p.e. la
estimulación cognitiva) han pasado, en la práctica, a formar parte de los
cuidados.
Más información:
No hay comentarios:
Publicar un comentario